
Hoy tenías una entrevista de trabajo muy importante. Sabiendo que la primera impresión es la que cuenta, decidiste ponerte una blusa blanca mangas tres cuarto, pañuelo con broche plateado alrededor del cuello al mejor estilo azafata, pollerita suelta color beige y sandalias con taquitos no muy altos. Debajo de la blusa un corpiño color piel para que el mismo no se transluzca; debajo de la pollera una tanguita de micro tul casi transparente para que no se marque en la pollera. El pelo tirado hacia atrás, recogido con una hebilla muy sobria. Maquillaje tranqui, con colores suaves tirando al rosa. Llegaste puntual a la cita, con una carpetita A4 bien apretada contra el pecho (para que no te miren fijo a los dos melonazos que la naturaleza te dio por tetas) en donde llevabas una copia impresa de tu currículum vitae. Entraste a la empresa y un asistente te acompañó hacia el despacho del gerente de recursos humanos: una bomba que rajaba la tierra de lo bueno que estaba y al que desearías no tener como compañero de trabajo (por eso de "donde se come no se caga" ¿vio?). Él te saluda con una sonrisa seductora, te da un firme pero suave apretón de manos y te indica que tomes asiento. Vos lo mirás embobada y sin importar cuántos títulos universitarios y de postgrado, cursos y experiencias laborales aparezcan en tu CV, te mordés y relamés los labios y dejás al descubierto la parte más básica y primitiva de tu naturaleza femenina y de hembra en celo. Apoyás la carpeta sobre el escritorio y cuando apoyás tus nalgas sobre la silla ¡PATAPLAFF! se rompe una pata de la silla y quedás tirada en el suelo, con la pollera hasta la altura del ombligo, las piernas semi abiertas y tu naturaleza desplegada sin censura frente a los ojos desorbitados del señor este...que acaba de ver lo más profundo de tí y ya nunca podrá olvidar esta primera impresión de vos.
Maldito vicio de las patas de las sillas de romperse en el momento menos oportuno, maldito vicio.
CONSEJO: Frente a una entrevista de trabajo, sugiero pantalón (no muy ajustado para que no se raje al sentarse), ropa interior negra y polera al tono.
Nota: Ponete contenta...porque si no te contratan, por ahí tenés buenas chances de que el bombón asesino te invite a salir.